El cuatroteísmo caribeño unió a todos en su contra al determinar que la cancunense Anahí González sea su candidata a senadora como “cuota indígena”.
Pero, no se trata sólo de un asunto impopular que se pueda subsanar con la imagen del Presidente y los programas sociales. También se trata de un asunto legal, que se arregla en “instancias federales, el INE y el TEPJF, es decir, que no pasa por manos locales, que serían una primera planchada en el Ieqroo y por una segunda, en el Teqroo.
Quizá la apuesta es que en Morena, todos se disciplinen y ninguna persona de los pueblos originarios, que sea además morenista, se atreva a impugnar.
Pero, el asunto trasciende a Morena. Una vez que quede registrada ante el INE, seguramente las dirigencias nacionales de los tres partidos del Frente y de Movimiento Ciudadano, se irán en contra de ella.
De igual forma, está lo ocurrido en las pasadas elecciones federales, en el que, a pesar de proceder como regidora de Cancún, Anahí, resultó electa diputada federal del 02 Distrito, que abarca Chetumal y la Zona Maya.
Pero, ahora las cosas no son tan iguales como hace dos años y medio.
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Caso Valladolid 2021
Ya hay un antecedente cercano en lugar y fecha, en los comicios federales de 2021 en Valladolid, de candidatos a diputados federales que se registraron como cuota indígena, pero fueron impugnados y, al final, el TEPJF ordenó que fueran sustituidos.
Pero el cuatrerismo caribeño, cuya principal “fortaleza” es no tener oposición en Quintana Roo, le apuesta a que tampoco tendrá alguna objeción legal enfrente para imponer a Anahí, como cuota indígena.
Para que el cuatroteísmo caribeño se salga con la suya al fin, tendrá que seguir contado con la complicidad de la “oposición”.
