Que el Congreso del estado es una olla de presión.
La XVII Legislatura parece todo, menos un sitio en el que se busquen el diálogo y los acuerdos.
El secretario del Congreso del estado, Benjamín Vaca, y el presidente de la Jugocopo, Renán Sanchez Tajonar, ambos del PVEM, están intratables y asumen al Poder Legislativo como patrimonio de su partido
La dupla de Benjamín Vaca y Renán Sánchez Tajonar han impuesto su parecer en el Congreso del estado e insisten en tratar a los demás diputados como sus empleados, entre los que también hay de primera, segunda y hasta de tercera.
En realidad, lo de la Junta de Gobierno y Coordinación Política (Jugocopo) es como aquella Gran Comisión de los tiempos del PRI.
Esta manera de “conducir” el Congreso del estado por la dupla Vaca-Tajonar ya no está gustando a la mayoría de los diputados.
Los agravios son diversos, y no sólo implican que Sánchez Tajonar siga en pre-campaña para la presidencia municipal de Cozumel a cuesta del Congreso del estado y que el trato a los diputados sea como de subordinados.
Lo cierto es que la dupla Vaca-Tajonar le vieron cara de pastel al Congreso del estado y se lo quieren comer todo y lo que quede, llevárselo a su casa.
