
China responde con fuerza y Europa no se queda atrás: las represalias comerciales contra Estados Unidos ya están en marcha.
Con un arancel del 84% y medidas sancionatorias inéditas, Pekín desafía abiertamente a Washington. Europa se suma con gravámenes del 25%. Los mercados tiemblan.
Escalada arancelaria: el conflicto que sacude los mercados
China sube la apuesta: aranceles de hasta 84% y sanciones
La respuesta china al nuevo paquete arancelario de Estados Unidos fue inmediata y contundente. A partir del 10 de abril, todas las importaciones estadounidenses hacia el país asiático enfrentan un arancel adicional que pasó del 34% al 84%.
Este movimiento, aprobado por el Consejo de Estado, marca una ruptura decisiva en la relación comercial entre ambas potencias.
Además, el Ministerio de Comercio de China activó una lista de control de exportaciones contra 12 empresas estadounidenses, incluidas firmas clave del sector tecnológico y aeroespacial, como Teledyne Brown Engineering y Kratos Unmanned Aerial Systems.
En paralelo, otras cinco compañías fueron inscritas en la “Lista de Entidades No Confiables”.
“Las medidas estadounidenses violan gravemente las normas de la OMC”, declaró un portavoz oficial, confirmando la presentación de una queja formal ante la organización.
Trump presiona y agrava la tensión global
El expresidente estadounidense Donald Trump desató esta nueva fase del conflicto al anunciar lo que él llamó un “Día de la Liberación Económica”, con aranceles recíprocos de hasta 104% sobre productos chinos. Esta decisión provocó un efecto dominó que arrastró no sólo a China, sino también a Europa, a tomar represalias.
La narrativa de confrontación se ha intensificado. Pekín insiste en que defenderá su soberanía y sus intereses económicos “con medidas firmes”. Xi Jinping, por su parte, aprovechó para recalcar su prioridad diplomática: fortalecer relaciones con países vecinos y asegurar una integración económica regional.
Europa también responde: 25% de arancel a productos de EU
Bruselas contraataca con una estrategia en tres fases
La Unión Europea activó su propio paquete arancelario en represalia por los gravámenes estadounidenses del 20% al acero y aluminio europeos. El plan, que arrancó en abril y se ejecutará en tres fases hasta diciembre, grava con un 25% productos como carnes, aceites vegetales, textiles, cosméticos y artículos electrónicos.
Aunque países como Francia lograron retirar temporalmente el bourbon y los vinos estadounidenses del listado —por temor a represalias más severas—, la UE dejó claro que está lista para ampliar sus sanciones si Washington no acepta negociar.
“Las medidas arancelarias dañarán más a la economía europea”, advirtió Hungría, único país que votó en contra del paquete.
Efecto dominó: bolsas globales en rojo y petróleo en picada
Asia tiembla: Tokio y Taiwán encabezan las pérdidas
El índice Nikkei 225 cayó un 3.93%, arrastrado por la incertidumbre, mientras que Taiwán sufrió una pérdida histórica del 5.79%. En contraste, los índices chinos resistieron con ligeras ganancias, reflejo de la confianza que Pekín busca proyectar.
Principales caídas en Asia:
- Taiwán (TAIEX): -5.79%
- Tokio (Nikkei 225): -3.93%
- Malasia (KLCI): -3.66%
- Singapur (STI): -2.46%
Europa en caída libre
Los principales índices europeos también registraron descensos superiores al 3%, con retrocesos históricos en Fráncfort (-3.57%) y París (-3.16%). Desde que Trump anunció la nueva ronda de aranceles el 2 de abril, las bolsas del continente acumulan pérdidas superiores al 10%.
Petróleo en su nivel más bajo desde 2021
La tensión comercial también impactó al mercado energético. El Brent cayó casi 3% y el WTI bajó a 57.73 dólares por barril. En una semana, el precio del crudo se desplomó 20%.
¿Y ahora qué? Escenario incierto para el comercio mundial
El endurecimiento de las medidas por parte de China y Europa deja a la economía global frente a un escenario de alta volatilidad. La confianza en las reglas del comercio multilateral se debilita, mientras las grandes potencias juegan una partida sin árbitro ni diálogo efectivo.
La pregunta clave es: ¿quién está dispuesto a ceder primero? Con elecciones en puerta en Estados Unidos y tensiones geopolíticas en múltiples frentes, el desenlace aún es incierto. Pero el impacto ya se siente en cada rincón del sistema financiero internacional.