La administración Trump ha recurrido a una medida sin precedentes para acelerar su agenda de control migratorio. El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) está canalizando US$ 10.000 millones a través de la Marina de EE. UU. para construir rápidamente una extensa red de centros de detención migrantes Trump en todo el país, en un esfuerzo por duplicar la capacidad actual y agilizar las deportaciones masivas.
Una estrategia de US$ 10.000 millones para duplicar la capacidad de detención
Este programa de contratación, que no se había reportado previamente, es un esfuerzo conjunto entre el DHS y el Departamento de Defensa (DOD). Representa el último ejemplo de la administración Trump utilizando a las Fuerzas Armadas de Estados Unidos para apoyar directamente sus esfuerzos de aplicación de las leyes de inmigración, derivado del deseo explícito de la Casa Blanca de intensificar drásticamente las operaciones de control migratorio a nivel nacional y arrestar a un número récord de inmigrantes.
Según fuentes familiarizadas con el proyecto y documentos federales de contrataciones, la construcción de algunas de estas instalaciones comenzará tan pronto como el próximo mes. El aumento en los arrestos de inmigrantes ha requerido más espacio de detención para mantener a las personas durante el procesamiento y la posible deportación.
El zar fronterizo de la Casa Blanca, Tom Homan, ha manifestado su objetivo de duplicar el número de camas de detención de manera rápida. Anteriormente, el ICE (Servicio de Inmigración y Control de Aduanas), que utiliza cárceles locales para retener personas, contaba con financiamiento para alrededor de 41.000 camas para alojar temporalmente a los detenidos.
La Marina como vehículo para acelerar la construcción
El DHS está utilizando el Comando de Sistemas de Suministro de la Marina como brazo de contratación para contratar empresas. Los funcionarios de Seguridad Nacional han estado tratando de encontrar formas de asegurar contratos rápidamente, dado que estos a menudo pueden retrasarse debido a las reglas federales de competencia. Una fuente señaló que el DHS ha estado “saltando de un vehículo de contratación a otro”, ya que los desafíos y retrasos en contratos previos han causado problemas al departamento.
El último enfoque contractual, a través del Departamento de Defensa, tiene como objetivo reducir el grupo de contratistas elegibles y acelerar significativamente el proceso de contratación. Todd Harrison, investigador principal del American Enterprise Institute enfocado en gastos de defensa, comentó:
> “No es sorprendente que hagan esto, especialmente para este tipo de construcciones de rápida implementación. Las Fuerzas Armadas son buenas en logística, y han tenido que realizar proyectos de construcción rápida como este en el extranjero. Ya se está tratando con una organización que sabe cómo hacer este tipo de actividad de contratación, y hacerlo rápidamente.”
Se espera que las nuevas instalaciones alberguen hasta 10.000 personas cada una y, según las fuentes, probablemente serán principalmente carpas de lados blandos. Se espera que se construyan en al menos seis estados:
- Louisiana
- Georgia
- Pensilvania
- Indiana
- Utah
- Kansas
Los detalles adicionales sobre las instalaciones siguen sin estar claros, ya que el proceso de contratación aún está en curso.
El cambio contractual: De operaciones en el extranjero a seguridad nacional
Para facilitar esta construcción acelerada, la Marina amplió discretamente un mecanismo de contratación existente en julio. Esta enmienda clave consistió en “agregar una nueva región geográfica”: Estados Unidos y territorios adyacentes.
Anteriormente, la solicitud de contrato, conocida como el Contrato Mundial Expedicionario de Múltiples Adjudicaciones, se había utilizado principalmente para apoyar operaciones militares en el extranjero. Sin embargo, en julio fue enmendada y ahora se conoce como “WEXMAC 2.1, Integridad Territorial de los Estados Unidos”.
Esta nueva versión señala que los contratistas “pueden verse obligados a proporcionar la infraestructura, personal, servicios y/o suministros necesarios para garantizar el confinamiento seguro y protegido de extranjeros bajo la custodia administrativa” del DHS y el ICE.
Requisitos operativos para el contratista: Custodia segura y protección
La convocatoria de la Marina listada en un sitio federal de contratación ofrece un adelanto de las exigencias que enfrentarán los contratistas. Se espera que construyan una variedad de estructuras dentro de las propias instalaciones de detención, incluidos:
- Tribunales.
- Espacios administrativos y de apoyo para el personal del ICE.
Además, los contratistas estarán obligados a garantizar acceso inmediato a servicios de emergencia y traslados a aeropuertos, destacando las variadas necesidades del ICE mientras trabaja para llevar a cabo la agenda de deportación masiva de la administración Trump.
La nueva solicitud estipula que los nuevos contratos involucrarán el Apoyo de Defensa a las Autoridades Civiles, un proceso mediante el cual los recursos y el personal militar de Estados Unidos pueden ser utilizados para apoyar misiones de aplicación de la ley a nivel nacional. También dice que los contratistas “proveerán la custodia segura, el cuidado y la protección de los extranjeros de acuerdo con las leyes estatales y locales, estándares, políticas, procedimientos para requisitos de armas de fuego, o las órdenes judiciales aplicables”.
Un punto crucial es que los contratistas que construyan y doten de personal las instalaciones no tienen “derecho de rechazo, y deberán aceptar todas las remisiones del ICE según corresponda”.
El precedente de Fort Bliss y la visión de Tom Homan
En julio, el ICE obtuvo US$ 45.000 millones de financiamiento adicional del Congreso para construir nuevas instalaciones de detención. Una de esas instalaciones se construyó en la base militar de Fort Bliss, en Texas y, según informes, violó docenas de normas federales de detención.
El DHS a menudo ha recurrido a instalaciones de estructuras temporales para manejar los incrementos de inmigrantes detenidos. Esto incluye el centro de detención del ICE en Fort Bliss, El Paso, Texas, capturado en una vista aérea el 8 de agosto de 2025. El uso de estructuras temporales, como las carpas de lados blandos mencionadas para los nuevos centros, refleja el apuro por aumentar la capacidad, a pesar de las controversias y las violaciones a las normas federales.
La línea entre la función militar y la aplicación de la ley migratoria parece difuminarse de manera peligrosa. El uso del Departamento de Defensa para evadir las normas de contratación y expandir rápidamente el sistema de detención plantea profundas preguntas sobre la transparencia y la legalidad de los métodos utilizados para llevar a cabo la agenda de deportación masiva de la administración Trump.









