Bill Belichick, el estratega detrás de la dinastía de los New England Patriots, se encuentra en la antesala de un nuevo logro: su posible ingreso al Salón de la Fama del Fútbol Americano Profesional en 2026. Un cambio en las reglas lo ha hecho elegible rápidamente, pero ¿qué otros grandes entrenadores aspiran a la inmortalidad junto a él?
El maestro de la estrategia busca la inmortalidad
Belichick, con seis anillos de Super Bowl, es sin duda una figura icónica. Su nombre es sinónimo de disciplina, innovación y éxito. Pero el camino hacia el Salón de la Fama no está exento de competencia.
- Su legado en New England es incuestionable.
- Ha ganado más de 333 juegos en temporada regular y playoffs.
- Fue dos veces campeón del Super Bowl como coordinador defensivo de los New York Giants.
Rivales de altura en la contienda
La clase de 2026 presenta a otros entrenadores legendarios, cada uno con méritos propios para ser considerado entre los más grandes de la historia.
Tom Coughlin: El constructor de dinastías
Coughlin llevó a los Jacksonville Jaguars a la final de la AFC en su segunda temporada y, posteriormente, guio a los New York Giants a dos títulos de Super Bowl, incluyendo la histórica victoria sobre los invictos Patriots en 2007.
Mike Shanahan: El arquitecto de ofensivas innovadoras
Shanahan, con dos anillos de Super Bowl con los Denver Broncos, revolucionó la NFL con su esquema de carrera por zona exterior. Su influencia se extiende a través de sus discípulos, como su hijo Kyle Shanahan, actual entrenador de los San Francisco 49ers.
George Seifert: El sucesor exitoso
Seifert continuó el legado de Bill Walsh en los San Francisco 49ers, ganando dos Super Bowls y manteniendo un récord impresionante de victorias.
Otros aspirantes al panteón
- Mike Holmgren
- Bill Arnsparger
- Alex Gibbs
- Chuck Knox
- Buddy Parker
- Dan Reeves
- Marty Schottenheimer
- Clark Shaughnessy
El legado en juego
La elección final recae en un comité de expertos que deberá evaluar el impacto y la trayectoria de cada entrenador. ¿Será Belichick el único elegido, o compartirá honores con otros gigantes de la dirección técnica? La respuesta definirá el futuro del Salón de la Fama.
