Alejandro Peza/CARIBE PENINSULAR
CHETUMAL.- La delegación de la Comisión Nacional Forestal (Conafor) en Quintana Roo informó que este año hay una baja incidencia de incendios forestales en el estado, el delegado José May Chan dijo que solo se han registrado 19 incendios contra 61 que se registraron en el 2024.
Destacó que hasta el momento se han registrado solo 19 incendios forestales con una afectación de aproximadamente 3,580 hectáreas, una cifra menor en comparación con los 61 incendios y más de 91,000 hectáreas afectadas durante la temporada 2024.
“Este año el comportamiento ha sido muy favorable. Aunque aún no termina la temporada y no podemos bajar la guardia, la humedad en la selva ha jugado un papel fundamental para evitar la propagación del fuego”, señaló May Chan.
El delegado de la Conafor, explicó que las lluvias constantes desde principios de año contribuyeron a mantener la humedad en el subsuelo, lo que ralentizó la expansión del fuego en zonas selváticas. Sin embargo, advirtió que los ecosistemas de sabana, más secos y de fácil combustión, siguen siendo vulnerables, especialmente en esta etapa de calor extremo que afecta a la región.
“La temporada crítica de incendios forestales en Quintana Roo avanza con un balance positivo, en gran parte gracias a las condiciones climáticas favorables y la efectiva coordinación entre los tres órdenes de gobierno”, dijo.
José Javier May Chan, explicó que en cuanto a la respuesta institucional, la delegación de la Conafor en el estado cuenta con 135 combatientes distribuidos en 8 campamentos estratégicos en los distintos municipios del estado.
Además, de que se sumaron 11 brigadas municipales con 110 elementos y cuatro brigadas rurales apoyadas por la Secretaría de Ecología y Medio Ambiente.
“Estas brigadas no solo responden ante incendios, sino que también trabajan de forma preventiva mediante la construcción de brechas cortafuego en áreas forestales”, dijo.
El delegado, subrayó la importancia del trabajo interinstitucional, destacando el apoyo de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Secretaría de Marina (Semar) y la Comisión Nacional del Agua (Conagua), cuyos recursos aéreos han sido clave para el transporte de víveres y descargas de agua en zonas de difícil acceso.
“La temporada ya no es tan predecible como hace 20 años. El cambio climático ha alterado los patrones, por eso debemos mantenernos alerta, sobre todo ante la llegada de la canícula en agosto, cuando se esperan temperaturas muy altas”, comentó el funcionario.
El delegado hizo un llamado a la ciudadanía y a las autoridades a seguir colaborando en la vigilancia y el cuidado del territorio forestal, ya que la prevención sigue siendo la mejor herramienta para evitar emergencias mayores.
