La capital de Ucrania, Kiev, enfrentó el domingo el segundo ataque nocturno consecutivo de Rusia, con una andanada de más de cien drones. Los ataques con drones rusos cobraron la vida de tres civiles y dejaron al menos veintinueve heridos, evidenciando la escalada del conflicto en medio de tensiones diplomáticas clave.
La madrugada de terror en la capital ucraniana
Las autoridades de Ucrania informaron que los ataques ocurridos la madrugada del domingo mataron a tres personas en sus hogares. Al menos veintinueve personas resultaron heridas, siete de ellas niños, en el segundo asalto nocturno consecutivo que cobró vidas civiles en Kiev.
El ministro del Interior de Ucrania, Ihor Klymenko, confirmó la identidad de algunas de las víctimas fatales, señalando que entre ellas se encontraban:
- Una adolescente de diecinueve años.
- Su madre, de cuarenta y seis años.
Los drones rusos provocaron grandes incendios en dos edificios residenciales ubicados en el distrito Desnianskyi de la capital. Los equipos de emergencia se movilizaron rápidamente, evacuando civiles de un edificio de nueve niveles y otro de dieciséis pisos, además de trabajar para apagar las llamas y despejar los escombros.
El testimonio de los supervivientes
El impacto emocional y físico de los ataques quedó registrado en las narrativas de los residentes. Olha Yevhenivha, de setenta y cuatro años, relató la dificultad de escapar debido a la densidad del humo generado por el incendio. “Incluso ahora nuestras ventanas están totalmente negras por el humo, y era imposible bajar, por eso pusimos mantas mojadas en nuestras puertas y el balcón”, detalló Yevhenivha.
Por su parte, Ihor Motchanyi, jugador de futbol, narró a la AP cómo él y sus padres “sobrevivieron milagrosamente” después de que un dron provocara un incendio dentro de su vivienda, solo un día después de su cumpleaños número veinticinco. Motchanyi explicó:
> “Mi madre y yo salimos. Mi padre se quedó en el apartamento y quiso llevarse algunos documentos, las cosas más importantes. No pudo salir porque había un incendio, así que saltó desde el (tercer) piso a un árbol cercano.”
El jugador agregó que, tras el incidente, su familia planeaba dejar Kiev temporalmente para quedarse con familiares en un pueblo.
Balance militar y solicitudes de defensa aérea
Según el reporte de la Fuerza Aérea de Ucrania, Rusia atacó el país con un total de ciento un drones durante la noche del domingo. De ese centenar de artefactos, noventa fueron derribados y neutralizados por las defensas ucranianas. Sin embargo, cinco drones lograron impactar en cuatro ubicaciones distintas, mientras que los restos de los drones derribados cayeron en otros cinco lugares.
Este asalto masivo se produce apenas un día después de que misiles y drones rusos hubieran matado a cuatro personas, incluidas dos en Kiev. La escalada bélica llevó al presidente de Ucrania, Volodymir Zelensky, a realizar nuevas súplicas a sus aliados occidentales para que le proporcionen con urgencia sistemas de defensa antiaérea.
Las versiones de Moscú y los ataques mutuos
El Ministerio de Defensa de Rusia afirmó el domingo que el día anterior sus fuerzas armadas atacaron infraestructura clave para el esfuerzo bélico de Ucrania, incluyendo:
- Instalaciones energéticas y de infraestructura ferroviaria.
- Puntos de despliegue de tropas.
- Una fábrica de drones.
Moscú no emitió comentarios específicos sobre los ataques directos en Kiev ni sobre las bajas civiles reportadas por Ucrania.
En contraste, Rusia reportó ataques en su propio territorio. En la región de Bryansk, cercana a Ucrania, el gobernador regional Alexander Bogomaz reportó que dos civiles fueron hospitalizados tras ataques de drones ucranianos. El Ministerio de Defensa en Moscú indicó que al menos veintiséis drones ucranianos fueron derribados sobre el suroeste de Rusia durante el domingo.
El diálogo geopolítico en vilo: cumbre Putin-Trump pospuesta
En un giro diplomático paralelo a la intensificación de los combates, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, dirigió ejercicios de las fuerzas nucleares estratégicas de Rusia a principios de la semana, que incluyeron lanzamientos de misiles de práctica. Este ejercicio se lleva a cabo al tiempo que se pospone la cumbre planificada sobre Ucrania entre Putin y el presidente estadunidense, Donald Trump, el último suceso en el esfuerzo intermitente de Trump por resolver la guerra.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, confirmó en declaraciones grabadas el sábado que no se ha acordado una nueva fecha para la cumbre. Peskov especificó que fue el presidente Trump quien tomó la decisión de posponer el encuentro, después de haber sugerido inicialmente que podría realizarse a finales de mes.
Peskov, sin embargo, insistió en que la cumbre no ha sido cancelada y rechazó la idea de que las recientes sanciones de Estados Unidos contra las principales compañías petroleras de Rusia sean motivo para abandonar el diálogo. En una entrevista con la televisión estatal rusa publicada el domingo, el portavoz describió las conversaciones de paz como “un proceso complejo”, añadiendo que: “Los presidentes no pueden reunirse por el simple hecho de reunirse; no pueden perder su tiempo, y son abiertos al respecto.”
La simultaneidad entre la escalada militar en Ucrania, marcada por la devastación de los ataques con drones rusos, y el estancamiento de las conversaciones de alto nivel entre Vladimir Putin y Donald Trump, subraya un escenario de tensión máxima. Mientras el Kremlin justifica la necesidad de encuentros con resultados tangibles, la realidad en Kiev demanda urgentemente defensas aéreas que protejan a su población civil de la ofensiva aérea.
