
Humberto Aldana volvió a cumplir su labor de pararrayos.
La polémica de la semana fue la delegación que asistió a la Fitur en Madrid. Las críticas fueron desde la inocua relevancia de algunos eventos hasta la presencia de funcionarios que nada tienen que ver con el turismo.
Pero quien “se llevó la noche” fue Humberto Aldana con su foto en el estadio Santiago Bernabéu, luciendo un traje de neo-fifí.
Las críticas no se hicieron esperar, y el diputado morenista se convirtió en el protagonista del periplo madrileño.
No hace mucho, Aldana también fue blanco de feroces críticas en medios por ser el “autor intelectual” del anexo del restaurante-cafetería en la sede del Congreso del Estado, donde la estatua de Don Andrés Quintana Roo fue la principal víctima del malogrado proyecto. Todos los excesos y fallas de la anterior legislatura terminaron resumiéndose en la figura del cancunense.
Y ahora, todos los excesos de la comitiva a la Fitur se resumen en la foto de Aldana en el estadio del Real Madrid. Lo demás pasó a segundo plano.
Y en una de esas, el diputado federal morenista pasaría de pararrayos a chivo expiatorio.