
Alejandro Peza/CARIBE PENINSULAR
CHETUMAL.-Los fondos de retiro de más de cinco millones de trabajadores del ISSSTE están en riesgo de perderse después de que se revelara que cerca de la mitad del capital de la empresa Aguakan es financiado por las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afores) Sura, Banamex, Principal y Pensionissste.
Las Afores son empresas que invierten el dinero en Sociedades de Inversión Especializadas de Fondos para el Retiro además de que administran las aportaciones de los trabajadores, sus patrones y el gobierno y generan rendimientos para los trabajadores.
El abogado de Aguakan, José Zapata, expresó su preocupación por cómo se ha desarrollado el conflicto y el impacto que esto podría tener sobre los trabajadores.
Destacó que Aguakan es una empresa 100% mexicana en la que participan 22.5 millones de trabajadores a través de las Afores, lo que representa cerca de la mitad del capital de la empresa.
La compañía subraya que la conclusión anticipada de su concesión debe proteger los ahorros de los más de 22.5 millones de trabajadores que han invertido en la empresa a través de sus fondos de retiro, garantizando un proceso justo para todas las partes involucradas.
Aguakan asegura que desde el inicio de su concesión, la empresa ha invertido 8 mil 865 millones de pesos en infraestructura, además de aportar 8 mil 736 millones en contraprestaciones y derechos a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y pagar 5 mil 824 millones en impuestos federales.
En diciembre de 2014, la concesión fue modificada para extender su vigencia y añadir al municipio de Solidaridad, con el respaldo del Consejo Directivo de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (CAPA), los cabildos municipales, el Congreso local y el Ejecutivo estatal. La empresa señala que cualquier cambio en la concesión debe garantizar la estabilidad financiera y la cobertura del servicio.
En este sentido, el Gobierno del Estado indicó que las acciones emprendidas contra Aguakan en ningún momento han implicado acoso ni acuerdo alguno.
Señala también que el actuar de la autoridad por la vía legal de ninguna manera constituye un riesgo para la inversión privada ni para las afores; y por el contrario, dichos inversionistas podrían ser víctimas de los hechos cometidos por ciertos accionistas y administradores de Aguakan, quienes desplegaron conductas ilícitas tanto en la prórroga y ampliación de la concesión como en el deficiente servicio que prestan a los quintanarroenses.